Sector inmobiliario vs greenwashing: ¿El sistema LEED es suficiente para disminuir la huella de carbono?

Por Samanta Escobar para el Economista

En el 2019, la construcción y operación de los edificios alcanzó su nivel más alto en emisiones de CO2, al representar 38% del total de emisiones a nivel mundial.

Desde hace unos años, LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, por sus siglas en inglés) es uno de los sistemas de certificación sustentable más utilizados por el sector inmobiliario; sin embargo, expertos indican que ésta podría no alcanzar para mitigar la huella de carbono de los edificios.

De acuerdo con el Informe de Estado Global 2020 sobre los Edificios y la Construcción, de la Alianza Global para los Edificios y la Construcción (GlobalABC), las emisiones provenientes del funcionamiento de los inmuebles en todo el mundo alcanzaron su nivel más alto en el 2019.

Las emisiones de dióxido de carbono (CO2) derivadas de la construcción y operación de los edificios representaron 38% del total de emisiones mundiales relacionadas con la energía ese año. Si bien, esta cifra es alarmante, también refleja el potencial que tiene el sector para hacer una aportación positiva en contra del cambio climático.

“La población tiene mayor conciencia de la huella ambiental que generamos, pero todavía no hay un cambio profundo. Al menos vemos modificaciones en el lenguaje, pero esto también ha llevado al greenwashing, pues existen muchos desarrolladores que dicen ser verdes porque saben que los clientes lo valoran, pero falta información para que estos compradores entiendan que es necesario mucho más para de verdad ser sustentable”, comentó Armando Turrent Riquelme, fundador y director general de Balance Grupo Inmobiliario.

Es en este contexto que surgió la Certificación Living Community Challenge, un modelo creado por El International Living Future Institute (ILFI) que establece los parámetros para que las comunidades comprueben que aportan más de los recursos que se utilizan para su edificación y mantenimiento.

A nivel mundial, existen 23 proyectos en el mundo aspiran a obtener este distintivo, de los cuales cinco cuentan con la acreditación del Master Plan Complaint y solo dos han obtenido la distinción de Comunidad Emergente, entre ellos se encuentra uno en México.

Se trata de Reserva Santa Fe, un complejo ubicado dentro de un bosque de 197 hectáreas, más de la mitad de la superficie se conservará como área verde, y el resto albergará casas unifamiliares, condominios y amenidades.

“Living Community Challenge es una certificación que se dio cuenta del daño que estaba haciendo LEED, porque es como aparentar una práctica sustentable. Es irresponsable que usemos esta certificación, incluso, en su nivel Platino, y sigamos contaminando”, declaró Turrent en entrevista.

Acciones sustentables

Además de apegarse a una estricta lista de materiales de construcción avalada por el ILFI, para no hacer daño al medio ambiente, ni a las personas que construyen las viviendas, Reserva Santa Fe ha logrado otros avances importantes.

Martín Gutiérrez Lacayo, director de Medio Ambiente y Sostenibilidad, informó que el proyecto cuenta con un software que modela que evalúa la eficiencia de los edificios, los cuales han logrado ser 70% más eficientes en el uso de energía que otras edificaciones similares.

Además, la casa club y las viviendas de la zona Punta Campana operan de manera 100% autónoma respecto a la energía y el agua, con una reserva de siete días en caso de emergencias.

Respecto al agua, los edificios son 60% más eficientes, ya que el desarrollo cuenta con un sistema de potabilización de lluvia sin uso de químicos, y también tiene infraestructura para tratamiento de aguas negras.

“En Reserva Santa Fe tenemos la visión de innovar y contribuir a implementar modelos de construcción regenerativa que sirvan como ejemplo para demostrar que se pueden hacer desarrollos habitacionales con enfoque en el que nuestro ecosistema. Todo este reporte es el resultado de décadas de esfuerzo e investigación constantes para desarrollar una comunidad única en el mundo”, añadió Turrent.

Cabe mencionar que la empresa ha puesto la información y experiencia en construcción sustentable y regenerativa que ha recopilado en más de 20 años, a disposición de otros desarrolladores inmobiliarios para generar un mayor impacto en el sector.

Este artículo fue tomado del sitio web de El Economista. Lee el artículo original aquí.

Día Mundial del Agua

El pasado 22 de marzo se conmemoró el Día Mundial del Agua, una fecha clave para reflexionar sobre la conservación de este recurso vital y promover soluciones innovadoras para su gestión eficiente.

Esto cobra mayor relevancia ante la advertencia de la ONU sobre un posible “día cero” en la Ciudad de México para 2028, es decir, un escenario en el que la ciudad podría quedarse sin agua. La falta de un sistema eficiente de captación de agua de lluvia y el alto consumo industrial e inmobiliario agravan la crisis hídrica, lo que hace urgente repensar la manera en que se gestiona este recurso. 

En respuesta a esta situación, en Reserva Santa Fe no solo buscamos minimizar nuestra huella ecológica, sino que también implementamos estrategias regenerativas que contribuyen a la restauración del ecosistema y la recarga de los acuíferos locales. 

Un modelo de autosuficiencia hídrica  

Contamos con un modelo innovador que garantiza una gestión eficiente y sustentable del recurso, reduciendo desperdicios y optimizando su uso. 

Entre las principales tecnologías implementadas destacan: 

  • Sistema de reciclaje de aguas grises: Mediante un proceso avanzado de filtración y purificación, el agua proveniente de regaderas, lavabos y lavadoras es reutilizada para riego de jardines, limpieza de espacios comunes y otras aplicaciones no potables. Esto permite reducir significativamente la demanda de agua potable en la comunidad. 
  • Infraestructura ecológica para la captación y restauración del agua: A través de lagos, represas y pozos de infiltración, el desarrollo capta el agua de lluvia y la devuelve al subsuelo, contribuyendo a la recarga de los acuíferos locales. 
  • Captación de agua pluvial: Las viviendas están equipadas con tecnologías que canalizan el agua de lluvia hacia sistemas de almacenamiento y tratamiento, asegurando su aprovechamiento durante la temporada de lluvia. 

Edificaciones autónomas y sustentables 

Edificios tales como la Casa Club y las viviendas de Punta Campana, entre otros, están diseñados para operar de manera 100% autónoma en términos de agua y energía, con reservas suficientes para cubrir hasta siete días en caso de emergencias. Gracias a sus sistemas de reutilización, estas construcciones son hasta un 60% más eficientes que las convencionales. 

Impacto positivo en la comunidad y el medio ambiente 

Nuestro sistema integral de gestión de agua contribuye directamente a la restauración del manto freático. El diseño regenerativo permite que el agua infiltrada fluya a comunidades cercanas, promoviendo un equilibrio hídrico en la región. Se estima que, una vez habitado, el desarrollo podrá reducir hasta en un 40% el consumo de agua por persona, marcando una diferencia tangible en la conservación de este recurso. 

Queremos crear una comunidad resiliente, capaz de adaptarse al cambio climático y a los retos de una metrópoli como la Ciudad de México. Más allá de un simple desarrollo inmobiliario, nuestro proyecto es una propuesta integral que fusiona lujo y sustentabilidad, generando una comunidad independiente que convive armónicamente con su entorno, sin dejar huella negativa en él.
–  Armando Turrent, CEO de Reserva Santa Fe

Descentralización urbana: vivir a los alrededores de la CDMX como apuesta para mejorar la vivienda

En los últimos años, la Ciudad de México ha enfrentado un crecimiento poblacional y urbano que ha llevado a una saturación considerable en su infraestructura y oferta habitacional. Con una población que supera los 9.2 millones de residentes, según el INEGI, la CDMX ocupa el segundo lugar en México en cuanto a densidad poblacional.  

Este escenario plantea la necesidad de explorar alternativas que alivien la presión sobre la capital. Una de ellas es la descentralización urbana, una estrategia que promueve el desarrollo de áreas suburbanas como solución para mejorar la calidad de vida y las opciones de vivienda de los habitantes.  

La descentralización urbana implica redistribuir el crecimiento poblacional y económico hacia localidades cercanas a las grandes urbes, fomentando el desarrollo de comunidades que ofrezcan opciones sostenibles, espacios amplios y entornos saludables. Este enfoque no solo reduce la saturación en la capital, sino que también ofrece una alternativa para quienes buscan un equilibrio entre la vida urbana y la tranquilidad de la naturaleza.  

El equilibrio perfecto entre ciudad y naturaleza 

En Reserva Santa Fe creemos que la descentralización puede transformar la forma en que vivimos, ofreciendote una combinación única de naturaleza, exclusividad y conectividad.  

Nuestros residentes disfrutarán de la serenidad que aporta el contacto con la naturaleza, con más del 86% del terreno destinado a espacios verdes. Este diseño busca proporcionar una experiencia de vida más saludable, reduciendo los niveles de estrés y promoviendo el bienestar. 

Además estamos comprometidos con la sostenibilidad y la autosuficiencia alimentaria, mediante nuestro proyecto de Bosque Comestible, parte del Programa de Producción de Alimentos. Este tiene como objetivo producir al menos el 60% de la dieta de los habitantes con alimentos orgánicos y saludables, a través de huertos, una granja y un apiario.  

La descentralización urbana, es una tendencia que responde a las necesidades actuales de los habitantes, y una oportunidad para crear comunidades más saludables, sostenibles y resilientes.  

El futuro de las ciudades está en crear espacios donde el bienestar y la conectividad coexistan. En Reserva Santa Fe, nuestra misión es ofrecer a las familias un lugar donde la tranquilidad, la naturaleza y las amenidades exclusivas se fusionen para mejorar su calidad de vida, sin sacrificar la proximidad a la ciudad.
Armando Turrent, CEO de Reserva Santa Fe. 

Descentralización urbana: vivir a los alrededores de la CDMX como apuesta para mejorar la vivienda

Ciudad de México, 10 de febrero de 2025. En los últimos años, la Ciudad de México ha enfrentado un crecimiento poblacional y urbano que ha llevado a una saturación considerable en su infraestructura y oferta habitacional. Con una población que supera los 9.2 millones de residentes, según el INEGI, la CDMX ocupa el segundo lugar en México en cuanto a densidad poblacional. ​

Este escenario plantea la necesidad de explorar alternativas que alivien la presión sobre la capital. Una de ellas es la descentralización urbana, una estrategia que promueve el desarrollo de áreas suburbanas como solución para mejorar la calidad de vida y las opciones de vivienda de los habitantes.

La descentralización urbana implica redistribuir el crecimiento poblacional y económico hacia localidades cercanas a las grandes urbes, fomentando el desarrollo de comunidades que ofrezcan opciones sostenibles, espacios amplios y entornos saludables. Este enfoque no solo reduce la saturación en la capital, sino que también ofrece una alternativa para quienes buscan un equilibrio entre la vida urbana y la tranquilidad de la naturaleza.

El equilibrio perfecto entre ciudad y naturaleza

Reserva Santa Fe es un claro ejemplo de cómo la descentralización puede transformar la forma en que vivimos. Ubicado a sólo 15 minutos de Santa Fe, este desarrollo ofrece una combinación única de naturaleza, exclusividad y conectividad. ​

Situado en un espacio privado de lujo en medio del bosque, este proyecto creado por Armando Turrent permite a sus habitantes disfrutar de la serenidad que aporta el contacto con la naturaleza, con más del 86% de su área destinada a espacios verdes. Este diseño busca proporcionar una experiencia de vida más saludable, reduciendo los niveles de estrés y promoviendo el bienestar.

Una de las grandes ventajas de vivir en Reserva Santa Fe es la oferta de amenidades exclusivas que fomentan la integración de la comunidad y el disfrute del aire libre. Los habitantes podrán aprovechar más de 25 km de senderos para caminar o andar en bicicleta, así como lagos, canchas deportivas, gimnasio, spa, salón de belleza, sauna, y espacios al aire libre. ​

Además, el desarrollo contará con ludoteca, zona infantil, restaurantes, bares, un invernadero y una cafetería, creando espacios ideales para la convivencia y el esparcimiento.

Pero la propuesta de Reserva Santa Fe va más allá de ser solo un lugar para vivir. El desarrollo se compromete con la sostenibilidad y la autosuficiencia alimentaria, mediante su proyecto de Bosque Comestible, parte de un Programa de Producción de Alimentos. Este tiene como objetivo producir al menos el 60% de la dieta de los habitantes con alimentos orgánicos y saludables, a través de huertos, una granja y un apiario. ​

Cabe destacar que el proyecto buscará la certificación de Living Community Challenge, otorgada por el International Living Future Institute (ILFI), un distintivo que garantiza que las comunidades generen más recursos de los que consumen durante su construcción y operación. ​

La descentralización urbana, como lo demuestra Reserva Santa Fe, es una tendencia que responde a las necesidades actuales de los habitantes, y una oportunidad para crear comunidades más saludables, sostenibles y resilientes. ​

“El futuro de las ciudades está en crear espacios donde el bienestar y la conectividad coexistan. En Reserva Santa Fe, nuestra misión es ofrecer a las familias un lugar donde la tranquilidad, la naturaleza y las amenidades exclusivas se fusionen para mejorar su calidad de vida, sin sacrificar la proximidad a la ciudad.” Armando Turrent, CEO de Reserva Santa Fe.

Descubra más sobre este proyecto único visitando www.reservasantafe.com, llamando al 55 5966 3533 o enviando un correo a info@reservasantafe.com. ​

Este artículo fue tomado del sitio web de Edificios de México. Lee el artículo original aquí.

Con diseño biofílico e inteligencia artificial: Así serán las viviendas en 2025

Según estudios, cerca del 80 % de las personas en el mundo utilizan inteligencia artificial (IA), incluso sin darse cuenta. Esta tecnología es una transformación disruptiva con impacto en todos los ámbitos de la actividad humana, señalan investigadores de la UNAM. ​

Esto se ve reflejado en todos los ámbitos, tal es el caso de la industria inmobiliaria. Estas innovaciones no solo transforman la forma en que se diseñan y construyen los edificios, sino que también priorizan el bienestar humano y la sostenibilidad ambiental.

De acuerdo con una encuesta publicada por Statista el 14% de las empresas dentro de la industria inmobiliaria usan Inteligencia Artificial, por lo que es una herramienta poco explorada y en reciente crecimiento. ​

¿Cómo se usa la inteligencia artificial para construir una casa? 

La digitalización está revolucionando la planeación de proyectos con herramientas como el Building Information Modeling (BIM), que permite optimizar recursos desde la concepción hasta la ejecución. ​

En Reserva Santa Fe queremos marcar un antes y un después en la industria inmobiliaria de lujo, combinamos tecnología de punta y armonía con la naturaleza. Contamos con una herramienta para medir y analizar cada etapa del proceso constructivo mediante una calculadora de emisiones, que permite realizar ajustes mensuales y acercarnos a la meta de ser un desarrollo de cero emisiones. ​

También utilizamos un modelado energético que asegura que nuestros edificios sean hasta un 70% más eficientes en el consumo de energía que construcciones similares.

“En Reserva Santa Fe unimos inteligencia artificial y sostenibilidad para ofrecer residencias de lujo que priorizan el bienestar y la conexión con la naturaleza. Este proyecto demuestra que tecnología, eficiencia y diseño responsable pueden transformar la industria inmobiliaria.” – Armando Turrent, CEO Reserva Santa Fe ​ 

Espacios diseñados para un bienestar integral

Esto va de la mano del diseño biofílico, un pilar clave en nuestro desarrollo. Integramos elementos de la naturaleza en la arquitectura y los espacios interiores para fomentar una conexión profunda entre las personas y su entorno. Este enfoque prioriza el uso de materiales naturales, iluminación adecuada, ventilación cruzada y la incorporación de áreas verdes, como jardines, techos verdes y paisajes circundantes. Además de su estética armónica, el diseño biofílico promueve el bienestar físico y emocional, mejorando la calidad de vida de los residentes al reducir el estrés, aumentar la productividad y fortalecer el sentido de pertenencia a un ambiente más sostenible y saludable.

Trabajar en la ciudad y vivir en el bosque, el equilibrio perfecto

Por Mairem Del Río para Emprendedor.com

Si necesitas un respiro del ajetreo citadino, encontramos un refugio donde la naturaleza, la sustentabilidad y el lujo se encuentran en un mismo lugar.

Imagina que después de pasar el día en la oficina, en medio del ajetreo, el tráfico y el ruido, llegas a un hogar rodeado de naturaleza, diseñado a tu medida y lejos del estrés de la ciudad. Para quienes enfrentan jornadas intensas en los grandes corporativos, vivir en el bosque, en un entorno natural, no solo es un lujo, sino una inversión en bienestar físico y emocional.

Estudios han demostrado que habitar en espacios verdes reduce el estrés, mejora la concentración y fomenta la convivencia familiar, ofreciendo un equilibrio perfecto entre la vida laboral y personal. Una investigación publicada en Nature Mental Health en 2024 encontró que vivir en áreas con mayor vegetación se asocia con un menor riesgo de desarrollar depresión y ansiedad. Además, un artículo de la BBC destaca que los parques y jardines en zonas urbanas ayudan a mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas.

A menos de 20 minutos del bullicio de la Ciudad de México se encuentra un oasis exclusivo para quienes buscan vivir en armonía con la naturaleza sin renunciar al lujo ni a la conectividad: Reserva Santa Fe, el primer conjunto habitacional regenerativo y resiliente en México y América Latina.

“La idea es aportarle a la naturaleza más de lo que le tomamos para construir, para vivir y para operar. Esto redefine el significado del buen vivir, al integrar de manera armoniosa a personas y comunidades con la naturaleza que les rodea a través de tres pilares de experiencia: wellness, sostenibilidad y lujo”, nos cuenta Itziar Puente, Gerente de Marketing de Reserva Santa Fe.

Un nuevo concepto en vivienda sustentable

Este desarrollo inmobiliario combina paisajes imponentes con un diseño arquitectónico minimalista y flexible. Cada propietario tiene la libertad de diseñar y construir su casa siguiendo lineamientos establecidos por el comité arquitectónico, que asegura que todas las edificaciones respeten la integración con el paisaje y el concepto general del proyecto, garantizando la cohesión estética y la sustentabilidad del entorno.

Los lineamientos arquitectónicos incluyen el uso de materiales ecoamigables y tecnologías que optimizan el consumo de recursos como agua y energía. Además, el desarrollo fomenta prácticas responsables entre sus residentes, como el reciclaje, el compostaje y el uso de sistemas de riego eficientes en los huertos.

“Nuestro principio rector es la conservación y la restauración del ecosistema, pero también la vida sana, el bienestar y el lujo. Eso es un concepto actual que ha evolucionado hacia lo que busca la gente que tiene resuelta parte de su vida en términos económicos.”, agrega Itziar. “Queremos que cada familia sienta que su hogar es único, pero al mismo tiempo, que forma parte de un entorno armónico y bien planeado”.

Un modelo inmobiliario hecho a la medida para vivir en el bosque

Reserva Santa Fe es uno de los tres proyectos a nivel mundial denominado Comunidad Emergente ante el International Living Future Institute, posicionándose como un proyecto modelo para futuros desarrollos en México y en otros países, reforzando el compromiso del cuidado ambiental, social y cultural de la región.

En su primera fase, este espacio cuenta con 184 lotes, distribuidos en 70,000 metros cuadrados de terreno. “Tenemos 7 kilómetros de calles internas y 25 kilómetros de senderos para caminar y andar en bici, además de plazas y diversos espacios de esparcimiento donde puedes convivir con otros residentes y vecinos”.

Más allá de la arquitectura e interiorismo, su principal característica es que ha sido construido bajo lineamientos sostenibles: regresará el agua a la región mediante represas, pozos de infiltración y lagos artificiales. También respetará la historia del lugar, así como los usos y costumbres de las comunidades vecinas.

Cercanía estratégica y tranquilidad asegurada

Uno de los principales atractivos de Reserva Santa Fe es su ubicación privilegiada. A pesar de estar rodeada de naturaleza, la comunidad está a unos 15 minutos de Santa Fe, a 40 minutos de Polanco y a una hora del centro de la ciudad, lo que facilita la movilidad y el acceso a las principales zonas de oficinas, escuelas, hospitales y centros comerciales. Esto permite a sus residentes disfrutar de un estilo de vida tranquilo sin perder la conexión con la vida urbana.

“La idea es ofrecer lo mejor de ambos mundos: la paz que brinda vivir rodeado de árboles, aire puro y silencio, y la comodidad de estar a un paso de todo lo que necesitas para trabajar y socializar”, comentan.

Ventajas de trabajar en la ciudad y vivir en el bosque

Para las personas de negocios y sus familias, este desarrollo representa más que un lugar para vivir: es una inversión en calidad de vida. Entre las características más atractivas de esta zona destacan:

Conexión con la naturaleza. Más del 60% del terreno está destinado a áreas verdes, con jardines, lagos artificiales y zonas boscosas que promueven el bienestar físico y mental.

Un entorno seguro. Se trata de una comunidad cerrada que cuenta con sistemas avanzados de vigilancia y control de acceso las 24 horas. “Tenemos un criterio de equidad muy fuerte, de inclusión y de no discriminación con un enfoque de género. Es decir, diseñamos los espacios de forma que sean seguros para toda la familia, desde mujeres, niños, bebés y adolescentes, hasta adultos mayores y personas con discapacidad”, nos explican.

Amenidades exclusivas. El conjunto cuenta con club privado, albercas, canchas deportivas y senderos para caminatas. También ofrecen actividades como yoga, remo, senderismo y recolección de hongos, entre otras.

Networking natural. La comunidad está compuesta por empresarios, ejecutivos y profesionistas, así como sus familias, quienes encuentran aquí un espacio ideal para compartir intereses y crear sinergias en un entorno relajado. “Las familias que vienen a vivir aquí son, en su mayoría, jóvenes de 35 a 45 años con hijos pequeños, quienes buscan darles la oportunidad de experimentar y sentir el bosque, de salir a jugar con sus amigos y vecinos. Son personas que ya no quieren estar entre cuatro paredes, sino olvidarse un rato de la red y los aparatos tecnológicos para reconectar con la naturaleza”.

Autocultivo y alimentación consciente para una vida saludable

Los residentes tienen la posibilidad de cultivar sus propios alimentos en huertos orgánicos diseñados dentro de sus propiedades o en áreas comunes destinadas para este fin. Además, el desarrollo fomenta el consumo de productos locales y orgánicos, colaborando con agricultores de la región para abastecer un mercado interno.

“Para nosotros, vivir aquí significa no solo desconectar del caos urbano, sino también reconectar con lo que comemos. Poder cosechar tus propias verduras y frutas te puede cambiar la vida”, explica Martín Gutiérrez Lacayo, director de Sostenibilidad en Reserva Santa Fe.

“La autosuficiencia alimentaria es una de las grandes ventajas de este lugar. Por eso tenemos un programa que se llama ‘Cosecha sana y bosque comestible’. Queremos que la gente produzca sus propios alimentos de manera sostenible”, detalla Martín.

El complejo alberga un invernadero donde producen muchos de los alimentos que ahí se consumen. “La idea es que la gente que viva en Reserva pueda desde preparar la tierra, sembrar y cuidar sus vegetales, hasta verlos germinar, cosecharlos y consumirlos. ¡Te cambia el chip cuando tú produces lo que comes! No solo cuidamos nuestra salud, sino también el medio ambiente”, agrega Gutiérrez Lacayo.

Con un enfoque que combina exclusividad, diseño personalizado y respeto por la naturaleza, Reserva Santa Fe redefine el concepto de lujo en México para vivir en el bosque con todas las comodidades. Aquí, el verdadero privilegio es despertar cada día rodeado de paz, belleza y posibilidades infinitas.

Este artículo fue tomado del sitio web de Emprendedor.com. Lee el artículo original aquí.

Con diseño biofílico e inteligencia artificial: Así serán las viviendas en 2025

Ciudad de México, 15 de enero de 2025 — Según estudios, cerca del 80 % de las personas en el mundo utilizan inteligencia artificial (IA), incluso sin darse cuenta. Esta tecnología es una transformación disruptiva con impacto en todos los ámbitos de la actividad humana, señalan investigadores de la UNAM. ​

Esto se ve reflejado en todos los ámbitos, tal es el caso de la industria inmobiliaria. Estas innovaciones no solo transforman la forma en que se diseñan y construyen los edificios, sino que también priorizan el bienestar humano y la sostenibilidad ambiental.

De acuerdo con una encuesta publicada por Statista el 14% de las empresas dentro de la industria inmobiliaria usan Inteligencia Artificial, por lo que es una herramienta poco explorada y en reciente crecimiento. ​

¿Cómo se usa la inteligencia artificial para construir una casa? 

La digitalización está revolucionando la planeación de proyectos con herramientas como el Building Information Modeling (BIM), que permite optimizar recursos desde la concepción hasta la ejecución. ​

Con un enfoque que combina tecnología de punta y armonía con la naturaleza, Reserva Santa Fe está marcando un antes y un después en la industria inmobiliaria de lujo, ya que utiliza una herramienta para medir y analizar cada etapa del proceso constructivo mediante una calculadora de emisiones, que permite realizar ajustes mensuales y acercarse a la meta de ser un desarrollo de cero emisiones. ​

Además, este residencial ubicado a 15 minutos de Santa Fe, utiliza un modelado energético que asegura que sus edificios sean hasta un 70% más eficientes en el consumo de energía que construcciones similares.

Esto no es una sorpresa, ya que este proyecto buscará la certificación de Living Community Challenge, otorgada por el International Living Future Institute (ILFI), un distintivo que garantiza que las comunidades generan más recursos de los que consumen durante su construcción y operación.

Bajo un diseño que obedece a lineamientos que garantizan la calidad y su carácter sostenible, Reserva Santa Fe fue diseñado integrando tecnología avanzada, eficiencia energética y un diseño centrado en el bienestar de los residentes.

“En Reserva Santa Fe unimos inteligencia artificial y sostenibilidad para ofrecer residencias de lujo que priorizan el bienestar y la conexión con la naturaleza. Este proyecto demuestra que tecnología, eficiencia y diseño responsable pueden transformar la industria inmobiliaria.” – Armando Turrent, CEO Reserva Santa Fe ​ 

Espacios diseñados para un bienestar integral

Esto va de la mano del diseño biofílico, un pilar clave en Reserva Santa Fe, ya que integra elementos de la naturaleza en la arquitectura y los espacios interiores para fomentar una conexión profunda entre las personas y su entorno. Este enfoque prioriza el uso de materiales naturales, iluminación adecuada, ventilación cruzada y la incorporación de áreas verdes, como jardines, techos verdes y paisajes circundantes. Además de su estética armónica, el diseño biofílico promueve el bienestar físico y emocional, mejorando la calidad de vida de los residentes al reducir el estrés, aumentar la productividad y fortalecer el sentido de pertenencia a un ambiente más sostenible y saludable.

Reserva Santa Fe combina lotes residenciales, villas y departamentos con una densidad mínima de 2.4 familias por hectárea, con más de 150 hectáreas de bosque que invitan a una conexión permanente con la naturaleza, reflejando los principios fundamentales del diseño biofílico.

Además, las amenidades del proyecto incluyen 4 lagos, senderos peatonales y para bicicleta, espacios de meditación y contemplación, parques para niños, mascotas y de aventura, diseñados para promover la serenidad y el equilibrio.

Reserva Santa Fe está redefiniendo lo que significa vivir en lujo sostenible y tecnología avanzada, creando un espacio que prioriza la salud, la comodidad y el cuidado del planeta. Descubra más sobre este proyecto único visitando www.reservasantafe.com, llamando al 55 5966 3533 o enviando un correo a info@reservasantafe.com.

Este artículo fue tomado del sitio web de Edificios de México. Lee el artículo original aquí.

Arquitectura regenerativa, un paso más allá de la construcción sustentable

Por Juan Rangel para Inmobiliare

La arquitectura regenerativa es una filosofía emergente que busca crear estructuras ecológicamente sostenibles que aporten algo más a la naturaleza.

Dicha tendencia no solo propone reducir el impacto ambiental de los edificios, sino revertir el deterioro provocado por el sector, creando un gran sistema proveedor de recursos y recuperando la armonía entre lo construido y lo natural.

El término fue acuñado por William McDonough y Michael Braungart en su libro “Cradle to Cradle: Remaking the Way We Make Things”, publicado en 2002.

Aunque reciente, esta actividad ya forma parte del trabajo de expertos en diseño y construcción. Ejemplo de ello es Ana Eugenia Vázquez, ganadora del concurso Contigo a la distancia, quien definió a la rama como “una forma de equilibrio con el medio ambiente, en vez de existir a costa de ella”.

Otro caso es Emmanuel Pauwels, cofundador del colectivo A Regenerative Place cuyo trabajo busca rediseñar los espacios hechos por el hombre.

“En la arquitectura regenerativa, el proyecto se ve como parte de la comunidad ecológica y no como una imposición en el paisaje”, indicó.

Reserva Santa Fe y sus avances en arquitectura regenerativa

Un ejemplo de este modelo de construcción es Reserva Santa Fe, proyecto ubicado en el Estado de México planeado para aportar más de los recursos utilizados para su edificación y operación, restaurando el ecosistema.

En entrevista para Inmobiliare, Martín Gutiérrez Lacayo, Director de Medio Ambiente y Sostenibilidad, aseguró que las obras han generado beneficios tanto ambientales como sociales, los cuales pueden leerse en su Reporte de Sostenibilidad 2024.

Uno de estos aportes son los trabajos de reforestación, permitiendo que los árboles dentro del complejo absorban hasta 10 mil toneladas de CO2 al año.

El abogado en derecho ambiental agregó que, en los últimos años, Reserva Santa Fe ha logrado la reproducción de especies vegetales y animales amenazados, como el charal o incluso axolotes que serán reintegrados al entorno. También la creación de un banco de semillas y la introducción de seis mil 500 herbáceas nativas.

Además, en los últimos tres años se han infiltrado cerca de 20 mil metros cuadrados de agua, utilizados tanto para la creación de tres cuerpos de agua como para el reabastecimiento de los mantos acuíferos.

Inclusión de pobladores en el plan de desarrollo

En materia social, Reserva Santa Fe genera empleo para pobladores locales, aprovechando conocimientos, tanto empíricos como académicos, en agricultura y botánica.

Ejemplo de esto, Gutiérrez Lacayo destacó el trabajo de Yazmin Santiago y Rosalio Gutierrez, encargados del invernadero donde se cosechan únicamente productos 100% orgánicos. Este opera bajo el programa de Bosque Comestible, que busca generar el 60% de la dieta de los habitantes.

“Vamos a crear invernaderos como este con nuestros vecinos, para que vengan y oferten a las familias del desarrollo. Serán productos sembrados con la misma técnica que nosotros aplicamos aquí”, compartió el abogado para Inmobiliare.

Finalmente,  Reserva Santa Fe está en proceso de obtener la certificación Living Community Challenge, la cual evalúa el cumplimiento efectivo de normas sustentables estrictas.

Este artículo fue tomado del sitio web de Inmobiliare. Lee el artículo original aquí.

Las tendencias inmobiliarias de 2025: Innovación, sostenibilidad y diseño humano.

La construcción sostenible, materiales reciclados, y la inteligencia artificial, forman parte de los lineamientos a los que apunta la industria este año.

Con la llegada de un nuevo año, comienzan las tendencias en diversos ámbitos y este 2025 la sostenibilidad junto a la inteligencia artificial son una apuesta global, ya que el 2024 estuvo acaparado por noticias acerca del cambio climático, así como el uso de dicha tecnología para implementarla en todos los ámbitos.

El panorama mundial tiene una apuesta por lo sostenible para la próxima década, de acuerdo con el Informe sobre la brecha de emisiones 2024 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la nueva Contribución Determinada Nacional (NDC por sus siglas en inglés) su aplicación debe reducir colectivamente el 42% de las emisiones de gases de efecto invernadero de aquí a 2030, además, para 2035 las emisiones deben reducirse un 57%.

Ante este panorama, Armando Turrent, CEO de Reserva Santa Fe, compartió las tendencias inmobiliarias sostenibles que veremos en 2025.

Estas tendencias no solo redefinirán la forma de construir, sino también cómo las personas viven y trabajan.

El futuro del sector inmobiliario radica en proyectos que integren tecnología, sostenibilidad y resiliencia climática. Debemos construir pensando en las próximas generaciones.

  1. Construcción sostenible como eje centralLa sostenibilidad sigue siendo una prioridad en la construcción. Materiales como concreto reciclado, madera certificada y bambú lideran las opciones ecológicas, reduciendo significativamente la huella de carbono de los proyectos. Además, estrategias como la economía circular buscan reutilizar materiales y minimizar residuos durante y después de la construcción.

    “Hoy en día, construir sin pensar en el impacto ambiental ya no es una opción. En Reserva Santa Fe, hemos adoptado una lista de materiales reciclados y utilizamos únicamente los que están permitidos en la lista del International Living Future Institute (ILFI). Además, el uso de tecnologías de energía renovable como pilares fundamentales de nuestros desarrollos”.

  2. Tecnología integrada: Edificios inteligentes y BIMLa digitalización ha llegado para quedarse en el sector inmobiliario. Herramientas como el Building Information Modeling (BIM) permiten planificar proyectos con mayor precisión, optimizando recursos desde la etapa de diseño hasta su operación. Además, los edificios inteligentes equipados con sensores y sistemas IoT (Internet of Things) gestionan eficientemente el consumo de agua, energía y otros recursos.

    “Gracias a tecnologías como BIM, se logran proyectos más eficientes y sostenibles. Esto te permite visualizar cómo cada decisión afecta al entorno y al presupuesto, generando beneficios para desarrolladores y residentes”.

    En ese sentido, en Reserva Santa Fe reafirmamos nuestro compromiso con la sostenibilidad mediante la instalación de 60 paneles solares de alta eficiencia, reduciendo la dependencia de combustibles fósiles y las emisiones de carbono. Además, utilizamos una calculadora avanzada de emisiones para medir y analizar cada etapa del proceso, desde la construcción hasta la administración. Esta herramienta permite realizar ajustes mensuales para optimizar operaciones y avanzar hacia la meta de ser un desarrollo de cero emisiones.

    También empleamos un software innovador que modela la eficiencia energética de las edificaciones, logrando que nuestros edificios sean un 70% más eficientes en el consumo de energía en comparación con otras construcciones similares.

  3. Flexibilidad y modularidad en los espaciosLa pandemia transformó las dinámicas de vida y trabajo, generando una alta demanda de espacios multifuncionales. La arquitectura modular, basada en componentes prefabricados, se posiciona como una solución práctica y sostenible al reducir costos, tiempos de construcción y desperdicios.

    “La flexibilidad es clave. Los diseños flexibles permiten que los espacios evolucionen con las necesidades de los usuarios, desde oficinas en casa, hasta áreas recreativas. La modularidad no solo ahorra recursos, sino que también responde rápidamente a los cambios del mercado”.

  4. Resiliencia climática: Preparados para el futuroEl cambio climático plantea desafíos significativos para la industria inmobiliaria. Proyectos diseñados para enfrentar desastres naturales están incorporando sistemas de drenaje avanzado, materiales resistentes a condiciones extremas y diseños que minimizan riesgos.

    “En un país como México, donde somos vulnerables a huracanes y terremotos, la resiliencia climática debe ser parte integral de cada proyecto. Esto no solo protege las inversiones, sino también la seguridad y bienestar de las comunidades”.

  5. Diseño biofílico y bienestar humanoLa conexión con la naturaleza es una prioridad en el diseño contemporáneo. Incorporar elementos como patios interiores, jardines verticales y grandes áreas abiertas mejora la salud física y mental de los residentes.

    “El diseño biofílico no solo es una tendencia, es una necesidad. En Reserva Santa Fe, integramos áreas verdes y vistas naturales para ofrecer un estilo de vida equilibrado y saludable”.

    Esta tendencia está ganando popularidad en México, especialmente en desarrollos turísticos y residenciales de lujo, en donde la demanda de espacios verdes y luz natural sigue en aumento.

Un futuro consciente

El sector inmobiliario de 2025 refleja un cambio hacia una construcción más responsable y adaptada a las necesidades humanas y ambientales. Desde tecnologías avanzadas hasta diseños sostenibles, estas tendencias representan una oportunidad para innovar y liderar en un mundo en constante cambio.

El reto no es solo construir edificios, sino crear espacios que sean relevantes, sostenibles y capaces de generar un impacto positivo en las personas y el planeta. Estamos construyendo no solo para hoy, sino para las generaciones que vienen.

Con calculadora de emisiones y materiales sostenibles: Así se construye el único residencial de América Latina que apuesta por la construcción regenerativa

Reserva Santa Fe ha presentado un informe de resultados sobre los procesos que lo posicionan como el único residencial en México y el mundo que aspira a obtener la certificación Living Community Challenge. Ubicado a solo 15 minutos de Santa Fe, este proyecto inmobiliario es pionero en construcción regenerativa en la región y aspira a convertirse en un modelo para la industria inmobiliaria del futuro.

 

Construcción regenerativa: el siguiente paso en la sostenibilidad

11 de septiembre de 2024. El sector inmobiliario está mirando más allá de la sostenibilidad; el nuevo horizonte es la construcción regenerativa, un enfoque que busca devolverle a la naturaleza más de lo que se le toma. Este modelo se basa en acciones como el reciclaje de materias primas, el tratamiento de agua, la instalación de paneles solares, la creación de huertos urbanos y hasta la integración de un bosque comestible.

El International Living Future Institute (ILFI), una organización sin fines de lucro con sede en Cascadia, Oregón, es la autoridad en construcción regenerativa, responsable de otorgar certificaciones como Living Community Challenge. Esta certificación se otorga tras una evaluación rigurosa, garantizando que las comunidades certificadas contribuyan más de lo que consumen, ayudando a restaurar ecosistemas.

 

Un proyecto único en su clase

De los 23 proyectos a nivel mundial que aspiran a obtener esta certificación, solo 5 cuentan con la acreditación del Master Plan Compliant y únicamente 2 han recibido la distinción de Comunidad Emergente, uno de los pasos hacia la certificación completa. Reserva Santa Fe es uno de estos proyectos, y además busca la certificación Living Building Challenge para uno de los edificios del complejo.

En su más reciente evento, donde se inauguraron las amenidades del residencial, se presentó un reporte que detalla los avances en sus procesos de construcción.

 

Avances hacia la meta de cero emisiones

Durante la presentación, Martín Gutiérrez Lacayo, Director de Medio Ambiente y Sostenibilidad, destacó los avances clave, como la instalación de 60 paneles solares de alta eficiencia, que eliminan la necesidad de combustibles fósiles y reducen las emisiones de carbono. Además, el equipo cuenta con una calculadora especial de emisiones que mide cada paso del proceso, desde la construcción hasta la administración, con el objetivo de alcanzar el estatus ZERO NET.

Además, los edificios del residencial son un 70% más eficientes en el uso de energía en comparación con otros proyectos similares. Reserva Santa Fe también ha implementado un software que modela la eficiencia energética de las construcciones.

 

Ahorro de agua y energía

Los edificios, como la Casa Club y las viviendas de Punta Campana, funcionan de manera completamente autónoma en cuanto a energía y agua, con una reserva de hasta siete días para emergencias. En cuanto al uso del agua, los edificios son un 60% más eficientes gracias a la reutilización del agua de lluvia, que se potabiliza sin el uso de químicos. El sistema de tratamiento de aguas negras también beneficia a las comunidades cercanas al proyecto.

Se estima que cuando el residencial esté completamente habitado, cada persona reducirá su consumo de agua en un 40%.

 

Conservación del ecosistema y bosque comestible

Reserva Santa Fe está implementando un programa de germoplasma para obtener semillas de mayor longevidad y producir árboles que ayuden a regenerar el ecosistema. También se están propagando especies que fijan nitrógeno en el suelo, ayudando a reconstruir áreas erosionadas.

Además, han desarrollado una app para que tanto residentes como empleados conozcan los 5,029 materiales prohibidos por el ILFI, asegurando que el uso de materiales sostenibles sea una práctica continua.

«Con estas acciones, no solo estamos beneficiando a los futuros residentes y vecinos de Reserva Santa Fe, sino a todo el Valle de Toluca», señaló Gutiérrez Lacayo.

Por su parte, Armando Turrent, fundador de Reserva Santa Fe, agregó:

Nuestra visión es innovar y demostrar que los desarrollos habitacionales pueden tener como prioridad la regeneración de recursos naturales y la conservación del ecosistema. Este informe refleja años de esfuerzo e investigación para crear una comunidad única en el mundo.

 

Para conocer más sobre este innovador proyecto y agendar una cita, visita www.reservasantafe.com, llama al 55 5966 3533 o escribe a info@reservasantafe.com.

 

Este artículo fue tomado del sitio web de Estilo DF. Lee el artículo original aquí.