Posicionan las ventajas del proyecto inmobiliario Reserva Santa Fe

Por Juan Carlos Machorro/ 29 de junio, 2022

Armando Turrent, CEO del proyecto Reserva Santa Fe, indicó que la iniciativa Reserva Santa Fe,  constará de edificaciones levantadas con productos ecológicos, sin estar conectados al drenaje o sistemas de electricidad tradicional.

Señaló que esta edificación entre el poniente de la Ciudad de México y Toluca, un proyecto inmobiliario busca ser punta de lanza en construcción sustentable.

En medio de unas 110 hectáreas de bosque, este proyecto tiene por objetivo la construcción de 500 viviendas de lujo, busca ser el primero en México y toda la región de América Latina en obtener la certificación Living Community Challenge, que tiene la finalidad de garantizar que las edificaciones permitan a sus habitantes interactuar con la luz natural, aire, comida, naturaleza del lugar y formar parte de la comunidad de forma regenerativa.

Se detalló que la Reserva Santa Fe busca regresar agua a la región, así como respetar la historia, usos y costumbres de las comunidades vecinas, mediante la construcción de lagos, represas, pozos de infiltración y el Santuario de Nacelagua, con un impacto de menos de 14% de la zona destinada para la edificación del proyecto.

De acuerdo con el plan del desarrollo, el conjunto habitacional en su conjunto tiene prevista la construcción de:

  • 500 viviendas desarrolladas en tres fases.
  • Terrenos por unidad de entre 1,100 hasta 5,000 metros cuadrados.
  • Granja y vivero propio para producción de alimentos.
  • Cuatro lagos.

Detalló que se trabaja en tres ejes, sinergia con las comunidades vecinas y brinden los servicios y comercio que requieran estas 500 viviendas de alta plusvalía que se establecerán en las 200 hectáreas del proyecto, que permitirá estar a 15 minutos de la zona de corporativos de Santa Fe. El desarrollo inmobiliario solo ocupará el 13.8 por ciento del terreno total.

Este desarrollo inmobiliario contará con un vivero, granja orgánica y fomento a los huertos en los hogares; se ejemplificó que en esta región se tienen 270 especies de fauna y unos 27 tipos de hongos comestibles.

En el caso de la certificación que tiene este proyecto es basarse en ser un complejo habitacional que permita que el impacto ambiental sea mínimo. Ejemplificó que un 89 por ciento de los ciclos de vida transcurren en una vivienda. Por ello, se fueron a un certificado más alto. El Internacional Living Future Instituto, conlleva sus estándares más allá de otras certificaciones.

Se informó que existen tres complejos habitacionales en el mundo, que tiene la más alta certificación de este organismo que sólo se otorga a aquellos sitios que cumplen los más altos estándares que desarrollan iniciativas ecológicas, que versa en energía, equidad, sitio de ubicación, salud y felicidad, agua, materiales y belleza, agregó que, todos los insumos se buscará no sean traídos, sino sean producidos de manera local. Al final se tendrán dos certificaciones, una a la comunidad y de las viviendas en lo individual.

Utilizan hasta el 59 por ciento de productos son de origen mexicano y se trata de crecer en dicho porcentaje. Las tres fases están diseñadas para comenzar en diciembre 2020 con 200 lotes y se crecerá con 100 unidades edificadas con villas unifamiliares. Para la tercer fase se tendrá una espera de avance de las primeras fases. Este es un desarrollo a 20 años para complementar su vivienda. Son casi 3 mil millones de pesos de inversión y unos 300 empleos directos.

Sobre el tema de la tasas de interés y adquisición de viviendas, se indicó que dependerá del capital de las empresas para establecer un apalancamiento a los vaivenes de la economía. Acepta que se necesitan productos financieros y vender con crédito.

Igualmente, abundó que las viviendas unifamiliares que se realizarán quizá se les deba dar financiamiento interno y sortear el alza de las tasas de interés. Una buena inversión inmobiliaria es lo mejor en tiempos de crisis y esperamos que los clientes premium la apuesta es la vivienda.

Mencionó que el corporativo Balance, que desarrolla proyectos inmobiliarios desde 1974 ha edificado 13 mil casas, más de 4 mil hectáreas desarrolladas en 11 entidades del país.

Comento que no sólo es decretar áreas protegidas, pues en la Ciudad de México, un 75 por ciento de los parques naturales presentan invasiones de predios. Por ello, abundó que se necesita  de una participación de todos los actores sociales para el respeto de los ecosistemas.

México apuesta por la construcción regenerativa con la primera certificación de este tipo en toda Latinoamérica

Por Mariana Calderon/ 29 junio, 2022

  • Reserva Santa Fe regenera poco más de 196 hectáreas, ubicadas en el centro del país, en un espacio habitacional en el que la naturaleza y su restauración tendrán un papel esencial y protagónico, con un primer edificio ya construido que cumple con todos los requisitos de la certificación Living Building Challenge.
  • Todo está siendo desarrollado a la luz de las certificaciones más estrictas a nivel mundial en términos de sostenibilidad y métodos de construcción regenerativos: el Living Community Challenge y el Living Building Challenge, creadas por el reconocido International Living Future Institute.

Ciudad de México, a 16 de junio de 2022.- Hace 7 años que la Organización de las Naciones Unidas aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. Fue un desafío importante a políticas públicas, industrias privadas y prácticamente todos los ámbitos que componen a la sociedad actual, incluyendo el mercado inmobiliario, responsable, quizá, en muchos casos, del deterioro de ecosistemas y la sobreexplotación de recursos a nivel mundial.

Hoy, Reserva Santa Fe, un proyecto orgullosamente mexicano, responde a esta agenda y a convicciones propias, convirtiéndose en el primer desarrollo en México y Latinoamérica que avanza hacia un modelo de construcción y vivienda regenerativo, como punta de lanza en la región en atravesar el proceso de obtener el certificado Living Community Challenge, presentado en 2006 por las prominentes figuras Jason F. McLennan y Eden Brukman, y el cual engloba diversos aspectos que juntos, hacen sostenible y regenerativo un espacio habitacional, incluyendo: Energía, Equidad, Sitio, Salud-Felicidad, Agua, Materiales y Belleza.

Pero ¿qué significa este modelo y cómo se llega a él? Es una certificación que apuesta por una transición fundamental para el presente y el futuro del planeta: pasar de un impacto menor al medio ambiente a lo regenerativo, ​ en donde los espacios construidos aportan más de los recursos que se utilizan para su edificación y mantenimiento, restaurando ecosistemas y regresando cuando menos el 5% adicional del agua y energía, “logrando una civilización que pueda crear mayor biodiversidad, capacidad de recuperación y oportunidades para la vida en cada adecuación y desarrollo”.

Las 196 hectáreas de bosque entre el Valle de México y el de Toluca, eran un retrato más de la explotación desmedida de recursos naturales: valles y cañadas por donde hace siglos corría el agua de diversos manantiales, hasta hace poco tiempo, tenían una apariencia cuasi desértica, estéril. En 2022, gracias a Reserva Santa Fe, y su alianza con los ejidatarios socios del proyecto, este espacio se está transformando en un ecosistema en el que sus habitantes se integrarán como agentes de conservación y enriquecimiento de la naturaleza -con menos del 14 por ciento del área total destinada a la construcción- y disfruten de una alta calidad de vida.

Antes de levantar cualquier edificación, Reserva Santa Fe asumió el compromiso de regresar agua a la región y de respetar la historia, así como los usos y costumbres de las comunidades vecinas, construyendo lagos, represas, pozos de infiltración y el Santuario de Nacelagua.

A principios de junio se concluyó la obra del primer edificio regenerativo de Latinoamérica, ubicado en el centro de Reserva Santa Fe, el cual se encuentra en etapa operativa dentro del proceso final de evaluación de la certificación Living Building Challenge.

El éxito y el cumplimiento de todas las metas para Reserva Santa Fe no significa un triunfo particular; por el contrario, representa un avance colectivo para la región y el país, en el que se deben enfocar todos los esfuerzos, públicos y privados, en la regeneración más que en un menor impacto ambiental, encontrando así una naturaleza propia respetando la que rodea y provee a todos.

Para más información acerca de Reserva Santa Fe o para agendar visitas y conocer más acerca de este innovador proyecto, por favor visite www.reservasantafe.com, en el teléfono 55 2167 3358 o vía correo a ​ info@reservasantafe.com.

Reserva Santa Fe apuesta por la construcción regenerativa con la primera certificación de este tipo en toda Latinoamérica.

Por Mónica Flores / Junio 21, 2022

Hace 7 años que la Organización de las Naciones Unidas aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. Fue un desafío importante a políticas públicas, industrias privadas y prácticamente todos los ámbitos que componen a la sociedad actual, incluyendo el mercado inmobiliario, responsable, quizá, en muchos casos, del deterioro de ecosistemas y la sobreexplotación de recursos a nivel mundial.

Hoy, Reserva Santa Fe, un proyecto orgullosamente mexicano, responde a esta agenda y a convicciones propias, convirtiéndose en el primer desarrollo en México y Latinoamérica que avanza hacia un modelo de construcción y vivienda regenerativo, como punta de lanza en la región en atravesar el proceso de obtener el certificado Living Community Challenge, presentado en 2006 por las prominentes figuras Jason F. McLennan y Eden Brukman, y el cual engloba diversos aspectos que juntos, hacen sostenible y regenerativo un espacio habitacional, incluyendo: Energía, Equidad, Sitio, Salud-Felicidad, Agua, Materiales y Belleza.

¿Qué significa este modelo y cómo se llega a él?


Es una certificación que apuesta por una transición fundamental para el presente y el futuro del planeta: pasar de un impacto menor al medio ambiente a lo regenerativo, ​ en donde los espacios construidos aportan más de los recursos que se utilizan para su edificación y mantenimiento, restaurando ecosistemas y regresando cuando menos el 5% adicional del agua y energía, “logrando una civilización que pueda crear mayor biodiversidad, capacidad de recuperación y oportunidades para la vida en cada adecuación y desarrollo”.

Las 196 hectáreas de bosque entre el Valle de México y el de Toluca, eran un retrato más de la explotación desmedida de recursos naturales: valles y cañadas por donde hace siglos corría el agua de diversos manantiales, hasta hace poco tiempo, tenían una apariencia cuasi desértica, estéril. En 2022, gracias a Reserva Santa Fe, y su alianza con los ejidatarios socios del proyecto, este espacio se está transformando en un ecosistema en el que sus habitantes se integrarán como agentes de conservación y enriquecimiento de la naturaleza -con menos del 14 por ciento del área total destinada a la construcción- y disfruten de una alta calidad de vida.

Antes de levantar cualquier edificación, Reserva Santa Fe asumió el compromiso de regresar agua a la región y de respetar la historia, así como los usos y costumbres de las comunidades vecinas, construyendo lagos, represas, pozos de infiltración y el Santuario de Nacelagua.

A principios de junio se concluyó la obra del primer edificio regenerativo de Latinoamérica, ubicado en el centro de Reserva Santa Fe, el cual se encuentra en etapa operativa dentro del proceso final de evaluación de la certificación Living Building Challenge.

El éxito y el cumplimiento de todas las metas para Reserva Santa Fe no significa un triunfo particular; por el contrario, representa un avance colectivo para la región y el país, en el que se deben enfocar todos los esfuerzos, públicos y privados, en la regeneración más que en un menor impacto ambiental, encontrando así una naturaleza propia respetando la que rodea y provee a todos.


Reserva Santa Fe pone su granito de arena para salvar al planeta con su proyecto de construcción regenerativa

Reserva Santa Fe incluye el primer edificio en Latam que cumple con los requisitos de la certificación Living Building Challenge.
Junio 20, 2022 / Por Ale Castillo

Reserva Santa Fe es el proyecto, orgullosamente mexicano, que ha comenzado a cumplir con la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible aprobada por la Organización de las Naciones Unidas hace 7 años, convirtiéndose en el primer modelo de construcción y vivienda regenerativo en México y Latinoamérica.

No es un secreto que el mercado inmobiliario es responsable en muchos casos del deterioro de ecosistemas y la sobreexplotación de recursos a nivel mundial, por lo que optar por un camino más sostenible debe ser una prioridad.

Sin embargo, con este proyecto habitacional México ha logrado dar un gran primer paso hacia un futuro más prometedor en pro del ambiente.

Reserva Santa Fe: wellness, sostenibilidad y lujo


Anteriormente, las 196 hectáreas de bosque entre el Valle de México y el de Toluca, eran un retrato más de la explotación desmedida de los recursos naturales, los valles y cañadas donde una vez habrían corrido ríos y manantiales estaban casi desiertos, razón por la que antes de levantar cualquier edificación, asumió el compromiso de regresar agua a la región, así como respetar la historia y costumbres de las comunidades vecinas, construyendo lagos, represas, pozos de infiltración y el Santuario de Nacelagua.

Este 2022, gracias a Reserva Santa Fe y su alianza con los ejidatarios –socios del proyecto– este espacio se está transformando en un ecosistema en el que sus habitantes se integrarán como agentes de conservación y enriquecimiento de la naturaleza con el fin de tener una buena calidad de vida sin invadir o dañar el entorno.

Para ello, menos del 14% del área total estará destinada a la construcción. De las 197 hectáreas que componen a Reserva Santa Fe, 110 son de bosque, 42 de lotes unifamiliares, 18 para etapas II y III que consideran Townhouses y condominios residenciales y 27 hectáreas de amenidades.

Dentro de las amenidades destacan la Casa Club (cuenta con alberca semi olímpica, piscinas techadas y al aire libre, gimnasio, spa, salón de belleza, ring box, vapor y sauna), además de espacios ambientados para diferentes experiencias wellness como: glamping, canchas de tenis y futbol, diferentes parques especiales (para niños, mascotas, patinetas y de altura), senderos peatonales, de ciclismo y para caballos, granja, vivero, puentes colgantes, zona para escalar, espacios de meditación, un apiario orgánico, zona de pesca y el Santuario Otomí, dedicado a la Virgen de los Remedios de Nacelagua.

En cuanto al diseño arquitectónico, Reserva Santa Fe prueba que la sostenibilidad no limita el lujo, sino lo potencia. Su diseño urbanístico mezclado con una selección especial de materiales y la paleta de colores aseguran una integración armónica con el entorno natural, además de una experiencia totalmente exclusiva en cada uno de sus edificios.

Camino a la construcción regenerativa


El primer gran paso de este proyecto es la construcción del primer edificio regenerativo de México y Latinoamérica, concluido a inicios de junio, se encuentra en etapa operativa dentro del proceso final de evaluación de la certificación Living Building Challenge.

Living Building Challenge, es una certificación que apuesta por una transición en favor del planeta, es decir, pasar de un impacto menor al medio ambiente a lo regenerativo, en donde las construcciones aportan más de los recursos que se utilizan para su edificación y mantenimiento. Esto quiere decir que para ello deben probar que son capaces de restaurar ecosistemas y regresar al menos 5% adicional del agua y energía, pues ya no basta con solo conservar, hoy en día necesitamos regenerar. Para más detalles visita reservasantafe.com

Reserva Santa Fe, el proyecto que aspira a la construcción sustentable

El desarrollo tiene previsto la edificación de 500 viviendas de lujo, en un contexto donde se prevé la regeneración de la zona
Nallely Hernández, 17 de junio de 2022

Entre el poniente de la Ciudad de México y Toluca, un proyecto inmobiliario busca ser punta de lanza en lo que a construcción sustentable y sostenible corresponde, se trata de Reserva Santa Fe, un desarrollo que, de acuerdo con su descripción, busca integrar bienestar, sostenibilidad y viviendas de lujo.

Así, en medio de unas 110 hectáreas de bosque, este proyecto, que tiene por objetivo la construcción de 500 viviendas de lujo, busca ser el primero en México y toda la región de América Latina en obtener la certificación Living Community Challenge, que tiene la finalidad de garantizar que las edificaciones permitan a sus habitantes interactuar con la luz natural, aire, comida, naturaleza del lugar y formar parte de la comunidad de forma regenerativa.

“Es una certificación que apuesta por una transición fundamental para el presente y el futuro del planeta: pasar de un impacto menor al medio ambiente a lo regenerativo, en donde los espacios construidos aportan más de los recursos que se utilizan para su edificación y mantenimiento”, explicó Reserva Santa Fe.

Además, el grupo desarrollador a cargo explicó que parte de la certificación se basa en restaurar el ecosistema del lugar y entre sus planes está regresar a él, por lo menos 5% del agua y energía consumida.

El reto de cambiar el desarrollo de la zona


Para la firma desarrolladora, Reserva Santa Fe ha servido para ayudar en la restauración de cerca de 196 hectáreas de bosque, las cuales anteriormente eran un símbolo de destrucción de recursos naturales.

“Valles y cañadas por donde hace siglos corría el agua de diversos manantiales, hasta hace poco tiempo, tenían una apariencia cuasi desértica, estéril”, consideró Reserva Santa Fe.

Bajo este escenario, Reserva Santa Fe se dice buscar regresar agua a la región, así como respetar la historia, usos y costumbres de las comunidades vecinas, mediante la construcción de lagos, represas, pozos de infiltración y el Santuario de Nacelagua, con un impacto de menos de 14% de la zona destinada para la edificación del proyecto.

De acuerdo con el plan del desarrollo, el conjunto habitacional en su conjunto tiene prevista la construcción de:

  • 500 viviendas desarrolladas en tres fases.
  • Terrenos por unidad de entre 1,100 hasta 5,000 metros cuadrados.
  • Granja y vivero propio para producción de alimentos.
  • Cuatro lagos.

“A principios de junio se concluyó la obra del primer edificio regenerativo de Latinoamérica, ubicado en el centro de Reserva Santa Fe, el cual se encuentra en etapa operativa dentro del proceso final de evaluación de la certificación Living Building Challenge”, detalló el grupo a cargo de la obra.

De acuerdo con la información del proyecto, la primera fase incluye 184 lotes de vivienda.

Una certificación viva


Desde el 2006, la certificación Living Community Challenge busca calificar en los desarrollos habitacionales aspectos que garantizan que un espacio habitacional es sostenible y regenerativo.

Los siete elementos que un edificio debe cumplir para alcanzar la Living Building Challenge son:

  • Lugar.
  • Agua.
  • Energía.
  • Salud + felicidad.
  • Materiales.
  • Equidad.
  • Belleza.

“El Instituto International Living Future se basa en la creencia de que proporcionar una visión convincente para el futuro es un requisito fundamental para reconciliar la relación de la humanidad con el mundo natural”, indica el organismo a cargo de la certificación que busca obtener Reserva Santa Fe.



Reserva Santa Fe planea ser la primera construcción regenerativa de América Latina

17 junio, 2022
Por Rubi Tapia Ramírez

Reserva Santa Fe, es un complejo residencial ubicado en el Estado de México, y pretende ser la primera construcción regenerativa de América Latina. 

Balance, la firma desarrolladora del proyecto, invertirá casi tres mil millones de pesos y generará dos mil empleos directos, de acuerdo con Armando Turrent, director general en Desarrollo y Ecología. 

El desarrollo se encuentra al interior de un bosque de 197 hectáreas, de las cuales 110 son de bosque, 42 de lotes unifamiliares, 18 para etapas II y III que consideran Townhouses y condominios residenciales; y 27 hectáreas de amenidades. 

En conferencia de prensa, Armando Turrent explicó que de las casi 200 hectáreas del desarrollo, solo el 13.8% será para construcción, ya que pretenden que más de 150 sean para parques recreativos, bosque y zonas peatonales.  

Reserva Santa Fe es un desarrollo de tres fases, según el directivo, en diciembre de 2020 se colocó la primera piedra de la Fase I, actualmente ya se inauguraron los 200 lotes unifamiliares. 

Mientras que a finales de 2022, estarán detonando la segunda Fase y la tercera está en espera porque quieren ver cuál es la reacción del mercado con el proyecto.  

Amenidades de Reserva Santa Fe 


Habrá una granja, viveros e invernaderos para la vegetación del desarrollo; en las 200 hectáreas de bosque, los habitantes podrán encontrar 270 especies de hongos, de los cuales 36, son comestibles. 

Adicional, 25 kilómetros de senderos para que los habitantes caminen o anden en bicicleta; un gimnasio con área de cardio, aparatos y pesas; alberca interior y exterior, jacuzzi; salones de aeróbicos, spinning, yoga y pilates; así como 100 metros cuadrados de parques de alturas con 10 retos de tirolesas.

También glamping y zona para acampar, área de picnic, gimnasios al aire libre, tiro con arco, parques para niños y perros, de patinetas; zona para escalar, estaciones de calistenia, espacios de meditación y contemplación; corredor de silvicultura, observatorio astronómico y campos de fútbol, entro otras amenidades. 

Sostenibilidad de Reserva Santa Fe 


Balance se dio a la tarea de pensar, de manera regenerativa, cómo regresarle al ecosistema lo que ellos estaban tomando del mismo; y bajo ese principio es que diseñan el plan maestro dentro de Reserva Santa Fe. 

De acuerdo con Martín Alberto Gutiérrez Lacayo, director de medio ambiente y sostenibilidad de desarrollo y ecología S.A.P.I., el proyecto contará con dos certificaciones: Living Comummunity Challlenge y Living Building Challenge. 

La primera certificación es otorgada por el Internacional Living Future Institute (ILFI) que certifica a la comunidad; según la explicación del directivo, esta es entregada cuando en el desarrollo habitan el 85% de la gente, es decir, que puede ser obtenida en siete u 10 años, dependiendo cuando se habite.  

Se debe cumplir al 100% los imperativos de esta certificación, son obligatorios y tienen que ser validados de manera efectiva; el instituto revisa que cumplas los siete lineamientos 12 meses después de que el 85% de la gente viva en el lugar”, informó Martín Alberto. 

Quien además explico que en el mundo, solo hay 27 proyectos en el mundo que están registrados para obtener la certificación Living Comummunity Challlenge, pero que de esos solo dos están en fase de construcción, y uno de ellos es Reserva Santa Fe.

Son siete componentes de esta certificación son: energía, equidad, sitio, salud y felicidad, agua, materiales y belleza. 

Por su parte, Living Building Challenge (LBC) de Internacional Living Future Institute, certificará de manera individual las casas y departamentos, así como la Casa Club.  

¿Quién es Grupo Balance? 


Grupo Balance es una empresa desarrolladora de proyectos inmobiliarios que inicio operaciones desde 1974; hasta la fecha llevan construidas y vendidas aproximadamente 13 mil viviendas. 

Su portafolio suma más de cuatro mil hectáreas; la compañía se localiza en 11 entidades federativas de México, además de Reserva Santa Fe se encuentra trabajando en otros dos proyectos en Ensenada, Baja California.




¿Por qué vivir en el bosque?

Una vivienda en un entorno natural es actualmente un lujo que pocos pueden experimentar, sobre todo en las ciudades.

El estar alejados del bullicio, las aglomeraciones de gente, el tráfico y de casi cualquier tipo de contaminación (del aire, lumínica, auditiva, etc.) permite a las personas mejorar su calidad de vida y su salud tanto física como mental. Además les proporciona la oportunidad de conocer, conectar e integrarse a los entornos naturales de forma respetuosa y responsable, desde la comodidad de sus hogares.

Las ciudades se han formado desde tiempos muy antiguos principalmente por dos motivos, las ventajas geográficas y los beneficios de vivir en proximidad a otras personas. Actualmente su crecimiento es uno de los principales indicadores de desarrollo de los países, está ligado con un aumento del PIB, los índices de educación de sus habitantes, el mejor desarrollo de empresas y fuentes de empleos, ente otros.

Si bien se han estudiado las ventajas de vivir en una ciudad, existen también estudios que nos muestran que el crecimiento de las ciudades de mayor tamaño y población tienen un efecto negativo muy importante en la salud de sus habitante y el medio ambiente.

Esto ha provocado que algunos sectores de la población empiecen a pensar en salir de las ciudades y buscar entornos más amigables para habitar, proceso que se vio acelerado por la pandemia por COVID-19, y la tendencia del trabajo en remoto.