Con la llegada de un nuevo año, comienzan las tendencias en diversos ámbitos y este 2024, la sostenibilidad es una apuesta global, ya que el 2023 estuvo acaparado por noticias acerca del cambio climático. Se prevé que en las cifras del año que acaba de terminar, se muestre un aumento de las emisiones de CO2 a la atmósfera, estableciendo un nuevo récord, alcanzando las 40,900 millones de toneladas, según revela el último informe anual publicado por el Global Carbon Project durante la COP28.
Por otra parte, el MSCI destaca en su informe Sustainability and Climate Trends to Watch for 2024, que este año deberá ponerse especial atención en las viviendas, ya que debido al calentamiento global, las personas están sufriendo de afectaciones en las estructuras de sus hogares, por lo que la industria inmobiliaria y de la construcción, deberán pensar en estrategias para adaptarse.
Ante este panorama, Martín Gutiérrez Lacayo, Director de Sostenibilidad y Medio Ambiente de Reserva Santa Fe compartió las tendencias inmobiliarias sostenibles en 2024.
Planeación urbana que se adapte al ecosistema
De acuerdo con el experto, las ciudades alrededor del mundo tendrán que generar estrategias para mitigar el impacto del cambio climático, esto a través de una planeación urbana, en la que la industria de la construcción jugará un papel importante.
“Aunque parezca algo obvio, la realidad es que la mayoría de los proyectos inmobiliarios deben apostar por estudiar con detenimiento el sitio o ecosistema en donde se construirán nuevas viviendas, esto con el fin de considerar riesgos a largo plazo, controlar la densidad de cuántas construcciones pueden establecerse en el terreno elegido, e incluso si este en realidad es apto por sus condiciones, para ser habitado”, señaló Martín Gutiérrez Lacayo.
Según el especialista, la mayoría de los residenciales en México se están situando en lugares donde habita flora y fauna importante, así como comunidades ya establecidas, por lo que los nuevos proyectos deben planificarse en función del lugar en el que se van a establecer y no al revés.
Resiliencia
El cambio climático ha impactado en todos los sectores y debido a los pronósticos seguirá en aumento, por lo que, en lugar de mirar al pasado, el sector inmobiliario deberá establecer lineamientos para tener la capacidad de enfrentar las adversidades y gestionarlas.
“El urbanismo, la arquitectura sostenible y la construcción deben tomar en cuenta la crisis climática, adaptarse y empezar a responder. Un ejemplo es seleccionar de manera específica los materiales que no sean dañinos ni para la edificación, ni para las personas. Utilizar materiales que tiene componentes reciclados, pueden reducir hasta un 49% la emisión de CO2 y en ese sentido, Reserva Santa Fe es una muestra, ya que utilizamos únicamente materiales que están permitidos en la lista del International Living Future Institute (ILFI)”, aseguró Gutiérrez Lacayo.
El especialista agregó que las nuevas generaciones de arquitectos se están mostrando más sensibles para encontrar medios pasivos que hagan más eficientes a las casas en materia de temperatura, funcionalidad y resistencia, esto sin dañar al planeta.
Construcción Regenerativa
La construcción regenerativa es una tendencia que busca devolver a la naturaleza más de lo que brinda, a través de la implementación de medidas como el reciclaje de la materia prima, el tratamiento de agua, paneles solares en las viviendas, energía renovable y huertos urbanos.
“La comunidad que habitará en Reserva Santa Fe, tendrá la certeza de que vivirá de manera regenerativa, es decir, que de los recursos naturales que utilizará como lo son la luz o el agua serán renovables. Nosotros produciremos nuestra energía y devolveremos al menos el 5%, lo mismo sucederá con el agua. Por otro lado, produciremos el 60% de los alimentos en un programa que llamamos cosecha sana, que no impacte al medio ambiente, que no esté sujeto a prácticas depredadoras como monocultivo, le apostamos a los huertos biointensivos y la silvicultura”, explicó Martín Gutiérrez Lacayo.