La meditación es una práctica milenaria, desarrollada probablemente en la India, y aunque no se conoce la fecha de su aparición, existen registros desde el año 1500 a.n.e., algunos historiadores creen que pudo practicarse desde el año 3000 a.n.e. A partir de la mitad del siglo XX ha crecido su popularidad en Occidente, sin embargo hay registros de su práctica en países no orientales desde mucho tiempo antes.
La palabra meditación proviene del latín meditatum que significa reflexionar. Se trata de un conjunto de prácticas comunes en varias religiones y disciplinas, que actualmente se utiliza con fines espirituales y en la búsqueda del bienestar mental, físico y emocional.
Tradicionalmente la meditación se practica sentado en el piso con un cojín o banco especial, con la espalda recta y los ojos cerrados, aunque hay otras formas de meditar, como en posturas de yoga o incluso caminando. La constante es que se busca la concentración y atención plena a los pensamientos, emociones y percepciones del entorno, sin engancharse en ellos.
Algunos de los beneficios de la meditación son:
Ayuda a prevenir el envejecimiento mental