Nearshoring, la tendencia que impulsa la sostenibilidad inmobiliaria en México 

Nearshoring, la tendencia que impulsa la sostenibilidad inmobiliaria en México 

A pesar de que la pandemia de COVID-19 se ve un poco lejana, los estragos que dejó siguen permeando a la sociedad, por lo que no sorprende que las actividades comerciales mundiales tuvieran que adaptarse a la emergencia sanitaria, fue así que tomó más fuerza el Nearshoring, la estrategia con la que una empresa busca centrar parte de su producción en destinos mucho más cercanos a su territorio.

En ese sentido, México se ha convertido en un socio comercial estratégico de países como Estados Unidos y Canadá. Resultado de esto, nuestro país podría incrementar su producto interno bruto (PIB) hasta 2.5% en los próximos seis años y alcanzar niveles de inversión extranjera directa (IED) de hasta 50,000 millones de dólares (mdd), de acuerdo con cifras del Consejo de Empresas Globales (Ceeg).

Ante este escenario, sectores de importante desarrollo en la región como el inmobiliario, también se han visto influenciados por esta estrategia, y para que sus construcciones sean atractivas para el mercado, deben enfocarse en un factor: la sostenibilidad, que incluye que sus desarrollos contemplen procesos de construcción, materiales y diseños amigables con el medio ambiente, además de que ofrezcan cercanía con sus trabajos a las miles de personas que llegarán a los lugares en donde se establezcan las fábricas o empresas. 

Santa Fe, es una de las promesas del nearshoring en México, ya que puede convertirse en el epicentro de los negocios en el país debido a que cuenta con 1.1 millones de m² ocupados, con 70 mil empleados en la zona, un nivel socioeconómico alto, así como un nivel educativo de primer nivel, esto de acuerdo con expertos como Martha Millán, directora de la división de Estrategias Corporativas de Newmark.

Reserva Santa Fe, al ser punta de lanza en sostenibilidad, cumple con todas las expectativas que buscan los inversionistas.

  • “Hoy el lujo se trata de experiencias y de conectar con las ideas más profundas de las personas. En ese sentido Reserva Santa Fe tuvo una planeación bastante extensa, en la que decidimos construir un proyecto sostenible, que logrará un equilibrio social e inmobiliario”.

El 39% de las emisiones de dióxido de carbono son producidas por la industria de la construcción, por lo que el sector inmobiliario debe contemplar que ante la creciente demanda de vivienda propiciada por el nearshoring, las empresas deben incrementar la sostenibilidad en sus procesos.